Ese otro que también me habita, acaso propietario, invasor quizás o exiliado en este cuerpo ajeno o de ambos, ese otro a quien temo e ignoro, felino o ángel, ese otro que está solo siempre que estoy solo, ave o demonio, esa sombra de piedra que ha crecido en mi adentro y en mi afuera, eco o palabra, esa voz que responde cuando me preguntan algo, el dueño de mi embrollo, el pesimista y el melancólico y el inmotivadamente alegre, ese otro, también te ama.
Lee todo en: Poemas de amor (I) - Poemas de Darío Jaramillo Agudelo
Ese otro que también me habita,
ResponderEliminaracaso propietario, invasor quizás o exiliado en este cuerpo ajeno o de ambos,
ese otro a quien temo e ignoro, felino o ángel,
ese otro que está solo siempre que estoy solo, ave o demonio,
esa sombra de piedra que ha crecido en mi adentro y en mi afuera,
eco o palabra, esa voz que responde cuando me preguntan algo,
el dueño de mi embrollo, el pesimista y el melancólico y el inmotivadamente alegre,
ese otro,
también te ama.
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