Los escraches a políticos

Por Izquierda Anticapitalista de Burgos

Los escraches a políticos han generado un gran debate social sobre esta modalidad de protesta popular. Parece que a la casta política no le ha sentado nada bien que ciudadanos les interpelen sobre los problemas que afectan al 99% y, en vez de afrontar la resolución del urgente problema de los desahucios, han preferido criminalizar a la protesta asociando a las Plataformas de Afectados por la Hipoteca con ETA, asociando de forma completamente falsa a los colectivos sociales con el terrorismo, buscando así deslegitimar sus reivindicaciones ante la inminente votación de la ILP sobre vivienda.

Esta ILP ha sido impulsada desde abajo y ha reunido casi un millón y medio de firmas que la respaldan. Está apoyada por la gran mayoría de los ciudadanos (más de un 90% según las encuestas) e incluye medidas paliativas básicas para un problema acuciante y urgente para millones de familias trabajadoras como la dación en pago, el alquiler social o la creación de un parque público de viviendas utilizando las centenares de miles de casas vacías en propiedad de los bancos. 

La tremenda transversalidad de estas demandas ha dejado al gobierno del Partido Popular más aislado todavía, cada vez con menos apoyo popular y apoyado solamente por los banqueros y empresarios para los que gobierna. 

Mientras la corrupción y los millones de euros fluyen entre las élites, la clase trabajadora se ve condenada a la miseria por políticas de austeridad que solo benefician a unos pocos. Sin embargo, las iniciativas de las PAH han demostrado que a través de la lucha hay otro camino; un camino para conquistar dignidad y derechos a través de la movilización ciudadana, representando a las mayorías en las calles, mediante alternativas concretas y reales.

El Partido Popular, en lugar de atender las necesidades urgentes del pueblo y de hacer caso a sus demandas, una vez más ha escuchado a la banca y no acepta la ILP.

El PP y UPyD rechazan la ILP y han presentado unas enmiendas que la cambia por completo. Las del PP proponen, en lugar de dación en pago, “facilitar que los deudores paguen”; la moratoria de desahucios solo para casos de extrema vulnerabilidad, como hace el decreto 27/2012, que no afecta a casi nadie. 
El alquiler social, pero no para quien lo necesite sino para un número muy pequeño de personas y en casos extemos. Además, estas enmiendas contienen modificaciones para adaptarse a la sentencia del TSJUE, pero desarrolladas de forma muy favorable a la banca. La ILP de la PAH es una propuesta de mínimos y no podemos aceptar que no se apruebe en su totalidad.

Foto de archivo "Movilización ciudadana "

La campaña de escraches es una vía de presión popular para intentar que los representantes parlamentarios escuchen la voz de los que sufren la problemática de la vivienda. Se lleva a cabo de forma totalmente pacifica, siguiendo normas éticas que prohíben tajantemente la agresión física al diputado o el insulto. Ya nos gustaría a nosotr@s que los empresarios tuvieran la mitad de escrúpulos cuando las empresas con beneficios envían al paro y a la miseria a los y las obreras, o los bancos cuando desahucian a la gente para dejar la vivienda vacía.

En el régimen actual no existen canales democráticos para dialogar con los representantes elegidos en las urnas. Tampoco existe la posibilidad de convocar un referendum, púes ese poder solo le corresponde al parlamento. Los escraches de la PAH son una reacción legítima y necesaria ante esta ausencia de democracia.

Los banqueros no necesitan hacer escrache, solo necesitan llamar por teléfono para que el gobierno (este y los anteriores) legisle a su dictado. El pasado noviembre se aprobó un decreto que recogía exactamente las propuestas de la banca que se habían publicado tres días antes. Ahora se limita ampliar mínimamente los dos decretos de 2012, que es lo que la banca está dispuesta a aceptar.

No cabe duda de que todos los derechos que hemos conseguido, tanto sociales, como civiles, como democráticos los hemos conseguido luchando. Son derechos conquistados, no regalados. 
La Plataforma de Afectados por la Hipoteca ha parado desahucios, ha hecho escraches, manifestaciones, se ha autoorganizado, en definitiva, ha construido democracia y abierto el camino para la conquista de derechos por parte de la clase trabajadora.

Muchos de nuestros y nuestras militantes, codo con codo con centenares de activistas de todo tipo, participan en estas movilizaciones. El deber de toda la izquierda que se diga anticapitalista es apoyar, sostener y ampliar las movilizaciones de la PAH, respetando la autonomía del movimiento.

El gobierno Rajoy, acorralado por la corrupción y su incapacidad política, intenta criminalizar a cualquiera que se oponga a su política de sumisión absoluta al gran capital. Los burdos intentos de difamar a Ada Colau y al movimiento pretenden distraer la atención de su incapacidad para resolver los problemas de los ciudadanos. La PAH ha conseguido marcar agenda política, demandando derechos pacíficamente los y las anticapitalistas apoyaremos y participaremos en todas las acciones que sirvan para la extensión de la movilización, luchando por demandas que son básicas para el bienestar de la clase trabajadora.