EL FRACKING NO ES EL FUTURO, SINO EL RETROCESO
El
fracking NO está arreglando la situación en las sociedades donde ya lo
han impuesto, al contrario, cada vez son más visibles las violaciones
provocadas a la tierra y otros atentados causados en la sociedad donde
se fractura.
Sabemos que la raíz del problema es el capitalismo,
con su derroche de recursos energéticos que no para en ningún momento,
ni para plantear cuáles son ahora o serán en un futuro sus
consecuencias.
Es imposible de entender cómo se explicará a las
futuras generaciones que el fracking “fue” bueno para la economía, sin
sentir profunda tristeza, odio y rechazo por cómo se destruyó la tierra
donde pisaba. Después la tierra NO volverá a ser igual, NI se podrá
cultivar, usar el agua o respirar el aire por la contaminación causada.
Ya
es hora de plantearnos que nosotros podemos evitar que esto suceda.
Las empresas contaminantes están en entredicho y sus políticos
compinchados más aún. La presión popular les hará desequilibrar y caer
porque solo son torres de fango.
El fracking es una burbuja
especulativa que se llevará por delante toda nuestra historia, cultura,
fauna y leyendas, así como la tranquilidad y fuentes de riqueza de la
tierra, que no son el gas, sino el saber que están libres de
contaminantes para las siguientes generaciones. No permitamos que pase.
Cuanta
más gente en público exprese que no va a permitir el fracking, más
cerca estará la victoria.
El siguiente paso es participar en las
asambleas antifracking para poder seguir luchando hacia una vida libre
de nocividad contra estos piratas sin escrúpulos.
PORQUE SI NO ERES TÚ, ¿QUIÉN? SI NO ES AHORA ¿CUÁNDO?
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