Por Acacio Puig
La Comuna/ Presxs y Represaliadxs del franquismo
"Al hilo de las recientes pintadas fachas en Burgos, en vísperas del 18 de julio"
Es sencillo dirigirse a ti:
Visto uno, vistos todos, tu memez no conoce fronteras y eres ajeno a
las diferencias ideológicas, a los matices, al pensamiento. Por tanto no hacen
falta los plurales porque como te digo, estás visto.
Tampoco hace falta la @ (supongo que sabes que es una de las fórmulas
inclusivas de los dos géneros –masculino y femenino-). Como tu dominio de
machito sobre tu mujer, la supedita a ti (si sigue aguantándote), ya le darás
noticia.
Como ocurre siempre en vísperas del 18 de julio, vuelves a salir de la
cloaca y pasas a la acción. En este caso, pintando estupideces en las paredes
de Burgos. Sí ya sabemos que “tu cotidiano” lo ocupas en responder a los
filtros informáticos y cada vez que aparecen las palabras Franco o franquismo.
Entonces tiras de chuleta y repites una y otra vez tu breve recetario de
insultos e infamias. Tu catequesis, para que lo entiendas.
No vamos a emplear mucho tiempo contigo, suponemos que eres joven y
conoces muy mal la historia de este país de señoritos y curas a los que
angustió sobremanera que el pueblo se sindicara, se organizara en partidos,
saliera del analfabetismo y defendiera sus conquistas políticas en tantas
ocasiones. Mira en alguna enciclopedia y documéntate un poco: Revolución
Asturiana de 1934, triunfo del Frente Popular en 1936. Fue entonces cuando tus
mayores se alzaron en armas. Por supuesto no solos, contaban con el apoyo del
nazismo alemán, del fascismo italiano y, ya ves tú, de las democracias
liberales que desde “la política de no intervención” echaron una buena mano a
tus compadres-ratas.
Tanto armamento extranjero fue la imprescindible clave de vuestro
sangriento “éxito militar”. Contabais con un ejército perdedor en todos los
conflictos internacionales, pero muy ducho en masacrar poblaciones, en
aterrorizar al pueblo. ¿Sabes quien era Mola? ¿y Queipo?
Así ocurrió en Burgos, instituida como miserable Capital de la Cruzada
que, sin conocerla, añoráis. Perdona, pasé al plural cuando esta carta os sirve
a todos.
Pero mira, la España del atraso, de los caciques, la corrupción y la
desigualdad, es la que padeces ahora. La España de los chorizos es la herencia
de siglos de mierda y también de lucha. Tú te quedas solo con la herencia de la
mierda.
Foto realizada en el Museo de Tarbes |
¿A que experiencia te agarras pues? Pero no, tú eres otro plebeyo que
desconoce lo que nos dio la dictadura franco-fascista. ¿Qué añoras tú que no
eres un señorito? ¿Lo que ofrecía el franquismo? Te voy a decir lo que ofrecía
el franquismo:
Si pensabas por tu cuenta y actuabas en consecuencia: detención y
tortura, cárcel, con frecuencia la muerte y en otros casos el exilio.
Si querías mejor futuro para tus hijos: emigración a donde hubiera
trabajo.
Si defendías la sexualidad como un derecho: abrirle la bragueta al
cura de turno.
Si tu hermana se echaba novio y quedaba embarazada: hospicio, aborto
clandestino o puta.
En fin, fascista, no sigo porque se que la lectura no es tu fuerte. No
confíes tampoco en que el músculo lo sea. A muchos como tú, nos los hemos
comido crudos.
Y ojito con la brocha. Aunque a ti no te pongan multas como
acostumbran a hacer con las gentes de izquierda (¿privilegios de familia?)…te
puedes encontrar con la brocha hundida en el duodeno (consulta el diccionario
si la palabra no te resulta familiar):
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