La idea principal del informe señala que el FMI fracasó a la hora de prevenir la crisis por tres razones que convergen. En primer lugar: la existencia de una fe incuestionable en dos paradigmas macroeconómicos: La autoregulación de los mercados financieros y la improbabilidad de que una crisis afectara a los países ricos.
Queda en evidencia que, bajo la apariencia aséptica de un estudio científico, los "expertos" en economía aplicaban paradigmas y creencias, admitiendo sólo lo que de antemano encajaba con unos esquemas preestablecidos, prácticas más acordes con el mundo mítico-religioso que con el científico." Numerosos conocimientos sesgados parecen haber jugado un papel importante. Groupthink hace referencia a la tendencia hacia la homogeneización de los grupos para considerar los temas dentro de determinados paradigmas sin cuestionarse sus premisas iniciales. En la plantilla del FMI la idea que prevaleció fue que la disciplina de mercado y la auto-regulación serían suficientes para evitar problemas financieros. También creyeron muy improbable que se diera una crisis en las economías avanzadas"(párrafo 42).
La segunda causa señalada es la coacción sufrida por los profesionales críticos del propio FMI. La coacción externa era ejercida por las autoridades financieras de Estados Unidos, Reino Unido y otros países poderosos: "El FMI fue ampliamente influído (y a veces intimidado) por la reputación de las autoridades, lo que constituye quizás un caso de captura intelectual"(párrafo 44) En otros casos la coacción de la disidencia se realizaba dentro del propio FMI mediante una política de incentivos. Así muchos profesionales "sintieron que expresar puntos de vista opuestos arruinarían sus carreras" (párrafo 56).
La política de incentivos también está relacionada con la tercera causa del fracaso del FMI. Estos al obtenerse en competición no favorecía la colaboración y el intercambio de información entre los diferentes departamentos. En resumidas cuentas, la falta de información adecuada por partir de presupuestos mitológico-dogmáticos, que a su vez eran reforzados por una jerarquía sacerdotal-económica y la atomización y competencia del nivel inferior en pugna por ganarse los favores de dicha jerarquía fueron la causa de la miopía o ceguera y posiblemente también del desastre y el empobrecimiento acelerado de la población en Europa.
A la vista de lo expuesto, podríamos pensar que, gracias a este informe las cosas cambiarán en un futuro próximo. No se hagan ilusiones, el mismo informe recoge citas de otros 7 anteriores desde 1995 en los que ya se advierte de lo mismo, denunciando así el círculo vicioso en el que se haya la institución.
Unas cuantas preguntas emergen después de esta recensión. ¿Hasta cuándo los reponsables políticos van a seguir fingiendo que hay una salida en el sistema? ¿Cuándo van a desterrar los vicios del discurso mitológico-económico según el cuál para que un país vaya mejor la mayoría tiene que vivir peor? ¿Hasta cuándo van a seguir apareciendo los expertos que no fueron capaces de predecir una crisis que tenían en los morros para decirnos lo que tenemos que hacer? ¿No deberían celebrarse juicios? ¿Cuándo le va a decir alguien al presidente del Banco de España "Por qué no te callas"? ¿Cuándo se sublevará la gente ante la mentira? ¿Acaso en 30 años como en Egipto?
Les dejamos el enlace del informe en inglés: http://www.ieo-imf.org/eval/complete/eval_01102011.html
Gracias.- Buena entrada.-
ResponderEliminarDeberíamos mirar hacia Islandia y su proceso constituyente, aunque en este país nos pueden quedar unos cuantos años.
!qué bueno !más entradas de estas...
ResponderEliminarTe lo has currado de lo lindo. Directo, preciso y ajustado a la documentación pública, no te podrán hablar de manipulación, ni de propagandismo. Y que juzguen a Rodrigo Rato, ¡¡¡YA!!!
ResponderEliminarque le fusilen
ResponderEliminarEnhorabuena.
ResponderEliminarGran entrada.
http://elmalditorober.blogspot.com