Por CGT Burgos
Son manifiestamente conocidas las múltiples dificultades que se encuentran
los trabajadores para ejercer un derecho tan fundamental como es el de la
huelga: servicios mínimos abusivos, presiones y amenazas por parte de los
jefes, mermas económicas que realmente no se corresponden con el tiempo
efectivo de huelgas, presiones de otros sindicatos que, por no ser
convocantes y quedar en evidencia, dificultan el legítimo derecho de
cualquier trabajador a secundar las huelgas.
A la empresa ADIF, esta arrogancia y menosprecio hacia unos derechos que son
constitucionales, en ocasiones les resulta muy cara teniendo que responder
ante la justicia con resoluciones y sentencias condenatorias, que derivan
en la mayoría de los casos en multas y sanciones. La última ha sido la
sustitución ilegal por parte de la empresa de una trabajadora que ejerció
este derecho en la estación de Burgos, por motivos más que suficientes para
movilizarse al estar tan castigada como el resto de las estaciones de ADIF
por traslados forzosos a cientos de kilómetros, continuas externalizaciones
de la actividad y trabajadores en situación de sobrantes.
Esta actitud empresarial dió lugar a la pertinente denuncia por parte de
CGT ante la Inspección Laboral, cuyo resultado ha sido el reconocimiento de
la infracción, levantando la correspondiente acta.
No se puede admitir que ningún “jefecillo de turno”, el cual también se
beneficiará de cuanto se consiga con las movilizaciones, vulnere derechos
fundamentales sustituyendo a trabajadores en jornadas de lucha.
CGT tiene el compromiso de no dejar que acciones de represión como la
citada queden impunes e invita a cualquier trabajador que considere que se
vulnere cualquiera de sus derechos nos informe para activar las medidas
necesarias. Desgraciadamente las políticas de desmantelamiento y continuas
privatizaciones de nuestro ferrocarril, nos obligaran a convocar nuevas
movilizaciones, único lenguaje útil con una dirección que desprecia
al colectivo ferroviario, resistiéndose a garantizar un futuro laboral.