Por Burgos Dijital
Las mentiras que se escucharon dentro: “La fractura hidráulica es una gran oportunidad económica para la provincia”; “creará numerosos puestos de trabajo”
Lo que se escuchó fuera: Pitidos, sirenas y “¡Fracking no!” “¡Echa el veneno en tu agujero!” “¡No vendréis a perforar a nuestros pueblos!” "¡Agua sin gas, nos gusta mucho más! (cuando empezó a llover)"
La Confederación de Asocaciones Empresariales de Burgos, presidida por Miguel Ángel Benavente, celebró ayer por la mañana día 28 de febrero, una conferencia cuyo invitado especial, Antonio Garamendi, explicó diferentes razones por las cuales son de un supuesto interés general las inversiones en la Fractura Hidráulica. La conferencia transcurrió con normalidad salvo por el fuerte dispositivo policial desplegado a las puertas de la Federación. Según el presidente de la FAE, la federación tiene el deber de defender el interés de todos los empresarios de Burgos, aunque obvian y pasan por alto la enorme oposición popular que hay contra el fracking, especialmente en la provincia de Burgos, y eso incluye también a empresarios: numerosos autónomos y otros empresarios del campo y del entorno rural, y vecinos que quieren sus campos, valles y acuíferos limpios.
El día fue muy crudo para los concentrados: hubo lluvia y fuerte viento. Incluso a un agente de policía se le voló la gorra al otro lado de las vallas, a los pies de los manifestantes, a donde tuvo que ir a recuperarla.
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